¡Enseñame la pasta!
2005-08-05 00:06:00
¡No os he contado que ya recibí mi primer checazo de la publicidad de google! La cosa tiene su aquel, ya que era el cheque del mes de julio, y me llegó el uno de agosto, este lunes pasado... a eso se refiere con lo de los treinta dias para cobrar: que una vez que pasas de cien dolares y cambias de mes, se toman su tiempo, casi un mes, para mandarte el dinerillo, en este caso, veintiseis dias, aunque, una vez enviado, la verdad es que va super rápido.
Así que el domingo por la noche, cuando entré al adsense a ver mis pauperrimas ganancias de julio y ví que en vez de salir un resumen de julio, me salia "Día 26, cheque enviado", os podreis imaginar como me puse. Entonces, el lunes, cuando volví por la noche de estudiar, allí estaba, el fruto de mis desvelos, la carta definitiva, que por cierto tenia una pinta muy discreta, imagino que para no llamar la atención, como cuando te llega la suscripción del "Superculonas"... la madre de todas las cartas, decia, la misiva que contenia mi super cheque de ciento ocho dolares.
La segunda sorpresa, aparte de la pinta de la carta, es que el cheque es realmente raro, es un folio con un montón de marcas anticopia doblado en tres partes, estando el cheque impreso en color en la parte de abajo, de parte de la sucursal de Citibank en Madrid... por cierto que os hará ilusión saber que el Citibank más cercano de Murcia está así como a 400 kilometros.
Así que el martes por la mañana me acerqué a mi caja de ahorros-no habitual, con ese cheque absurdo, por lo raro, en la mano, sintiendo una conmoción en la fuerza que me indicaba que iba a ser un follón cobrarlo y... efectivamente, lo fue.
Llego, y como en agosto no hay ni dios en ninguna parte, en la caja no van a ser menos y tiene a dos o tres jovenes, imagino que de practicas, en vez de los empleados habituales. Me acerco a la ventanilla, donde un tipo de unos veintipico, nieto o bisnieto de Tony Manero, con un polo abierto hasta el ombligo y una cadena de oro de medio kilo flotando entre la selva del pecho, al coger la hoja con el cheque, me mira y me dice "¿Esto que es?" como diciendo "¡Que te crees que me la vas a hacer en mi primera semana!". "Es un cheque y querria cobrarlo." digo yo, sintiendome como el que intenta colar un billete de diez euros falso en el mercadona.
Como el tema cheque supera a Tony, me pasa con su compañera, infinitamente más agradable a la vista, y apuesto que al tacto, pero que como tampoco tiene ni la más remota de que pueda ser esa cosa medio hoja medio dibujo infantil simulando un cheque, me pasa a una mesa con "el atontao", como le gusta que le llamemos, es decir, el único empleado normal que no ha podido poner tierra de por medio del curro este verano, sorprendentemente, por otra parte.
En realidad el tio es simpatico, aunque algo despistado. Y se portó de puta madre, teniendo en cuenta que el cheque tenía no uno sino DOS errores en los identificadores númericos. Primero, el típico númerazo de 20 cifras de las gestiones bancarias tenía uno de los códigos mal, por lo que el ordenador decia que el cheque era falso. Mola-no. Despues de un buen rato al telefono (él) tanto con la sede de su caja como con la de citibank, y de decir casi siempre mal los números, los de citibank consiguieron encontrar cual de los cuatro o cinco números estaba mal. Por si acaso no colgó, y ahí estuvo bien, jugón, Daimiel, porque al momento surgió otro problema, otro de los idenficadores estaba mal, tenía una cifra de menos. Solucionado rápido, cobrado lento.
¡Cobrado lento porque aún no lo he podido cobrar! Se supone que tengo que esperar tres dias para poder convertirlo de numeritos en el cajero en dinero de verdad... bueno, se supone, no: es, porque ya lo he intentado y no me ha dejado sacarlo.
Mañana se pasan los tres días, así que cobraré por fín mis 88,23€: la conversión, que hacen en google (el cheque ya está en euros) menos el 1'10 que se quedan los de la caja.
¡Mañana seré rico!