Coño, me gustaba a mi este tio. Me caia bien, y me parecia que por fin habia lateral izquierdo para La Roja, y que, en cuanto largasen al abuelo y llegara un entrenador que no se pasara los partidos agachado con la cabeza entre las manos, seria indiscutible. Lateral con clase y fuerza, extremo con calidad y la cabeza levantada para saber llegar a fondo y ponerla rasa hacia atrás.

Ni siquiera que el imbecil de Telecinco (¿redundancia?) haya dicho que ha fallecido de un fallo multiorgasmico me va a alegrar la tarde ya...